sábado, 20 de junio de 2009

Sensibilidad social

No necesariamente significa una personalidad sensible.
Sin ir mas lejos, Perón y Alfonsin eran hombres de sensibilidad social, pero de una personalidad y caracter muy fuertes.

A mi modo de ver, ese es el perfil ideal para un presidente.
Y es una característica que no puede faltar en toda persona que pretenda recorrer los caminos de la política.
Después de todo, la política es la actividad que busca el bienestar social.

Mas o menos al mismo tiempo de la globalización y el auge de la economía de mercado, las sociedades han empezado a olvidarse de la sensibilidad social de los candidatos a los que ivan a votar y se han dejado llevar por atributos tan falsos como el carisma, o la pasta de campeón, y hasta por la estética de la persona.

Y así estamos.

Pongamos en ejercicio el ojo y el oído para descubrir en los políticos si tienen o no sensibilidad social.
No es nada difícil, basta con el sentido común.
De esta forma las cosas empezarán a cambiar.



miércoles, 17 de junio de 2009

Trenes.

Nuevo trazado ferroviario Nacional, popular, federal, y de Distribución del ingreso

Quiero un tren que recorra el país entero de Norte a Sur para que los alimentos y bienes se distribuyan en forma barata y estén disponibles para los consumidores a un precio mas económico que el de hoy.
De esto se trata la distribución de la riqueza.
Los alimentos aquí en argentina son caros para lo que es este país, y esto es una injusticia y una vergüenza.

Con este tren, los aumentos en el gas oil no influirán significativamente en el precio de los alimentos. Porque los combustibles, seguirán aumentando en el mediano y largo plazo.

El tránsito de personas también sería beneficiado en gran escala, subsidiando el pasaje a aquellos de menores ingresos. Los argentinos que no tienen hoy posibilidades de viajar por sus propios medios (que son la mitad) podrán realizar esos viajes para conocer las bellezas de nuestro país y las distintas culturas que existen dentro de nuestras fronteras.

Este proyecto de tren Norte-Sur, empieza a dar sus frutos desde el minuto cero. Ni bien se empiece a construir, generará miles de puestos de trabajo genuinos y altamente dignos.

Su construcción se realizaría por segmentos en todas las provincias involucradas pero en forma simultánea, para efectuar un shock de empleo y salarios en sectores bajos que son los que dinamizan instantáneamente la economía nacional por medio del consumo.

El trazado de su vía debe priorizar a los pueblos chicos, y no necesariamente a las capitales provinciales. Esto dará mayor dinamismo a esos poblados por el gran movimiento comercial que tendrán sus estaciones debido al volumen de mercancías que se movilizarán desde distintas regiones, y al surgimiento de nuevos servicios adicionales que esto generará (transporte, alimentación, hospedaje, turismo, etc)
Y se producirá quizás, descomprimiento poblacional en las grandes urbes.
También quizás, se fortalecerían los valores y costumbres de nuestras tradiciones nacionales.

Este proyecto representa un enorme avance en la verdadera distribución de la riqueza, porque casi todas las provincias involucradas serán las que mas pobreza y desocupación tienen hoy (Jujuy, Salta, Tucuman, Catamarca, La Rioja, San juan, Neuquen, entre otras).

Para los que no lo saben, las líneas ferroviarias que funcionaron en Argentina fueron construías bajo la influencia de intereses europeos. Si miramos el mapa ferroviario nacional, vemos que su diagrama es como un abanico cuyo vértice es Buenos Aires, osea, el puerto.
Los intereses europeos eran sacar las materias primas en forma barata y fácil de nuestro país (carne, cueros, granos, etc).
Las empresas inglesas que nos vendieron los trenes, nos vendieron también esta disposición de toda la red acorde a sus propios intereses, los de llevarse las riquezas de estas tierras.


Acá podes ver el mapa ferroviario nacional tal como es hoy en día:
 http://www.cnrt.gov.ar/mapasferro/indexmapa.html

lunes, 15 de junio de 2009

Nosotros y la crisis financiera

Estamos viviendo un minuto histórico en el país y en el mundo que seguramennte va a quedar marcado como una bisagra en el curso de la política económica y las demás políticas en general.

En el mundo acaba de hacer crisis el capitalismo en su componente parasitario que es el financiero especulativo.

Porque hay que aclarar que esta crisis explotó en el sector financiero especulativo y no en la economía real. Entendiendo a la economía real como la que conocemos todos y hacemos a diario, el comercio, la industria, el agro, los servicios, en fin. La economía especulativa es la que opera en las bolsas de timba y en los bancos, desplazando fondos de inversión de un lado a otro del mundo según se olfateen oportunidades de obtener ganancias usureras de manera relativamente fácil y rápida.
Son estos movimientos de capitales financieros a escala mundial los que, con sus fugas desreguladas, generan grandes inestabilidades perjudicando siempre a los países de la periferia.

La economía real se vio afectada porque en muchos lugares del mundo estos capitales golondrina (cruza con buitre) estaban invertidos en acciones de empresas de la economía real, y al empezar esta crisis fueron retirados abruptamente a causa la incertidumbre y la falta de confianza, haciendo caer los valores de las acciones y la financiación de las empresas.

En esta crisis no se termina el capitalismo, sólo se moderan esos grandes flujos de capitales financieros. Pero el sistema va a continuar igual y esos flujos van a empezar de nuevo su juego ni bien se reestablezca la confianza.
Es prioridad crear reglas claras y contundentes para encausar y controlar esta especulación para evitar otra fragil burbuja económica mundial.

En lo que a nuestro país respecta, no nos afectó demasiado la crisis mundial porque aquí operaban pocos capitales golonbuitres, no porque nuestra economía opere con pocos, sino porque ya hacía varios meses que estaban emigrando hacia otros territorios espantados de aquí por la inestabilidad política e institucional y por la incertidumbre general que está aplicando el gobierno de turno como política de estado.

Pero a lo que quería llegar es que mientras en el mundo pasa todo esto, nuestra joven Argentina está recién vislumbrando el camino que debe andar, y que debió haber tomado hace unos cien años mas o menos. Recién estamos descubriendo que debemos apoyarnos en nuestros recursos estratégicos para ser un país fuerte, que podemos tener un sistema económico tan fuerte que ninguna crisis importada lo pueda voltear, y que podemos acercarnos al pleno empleo.
Y es natural que así sea, los países de América del sur y central somos sociedades que estamos en la adolescencia hablando en tiempos históricos. Y si a esto le sumamos las dictaduras militares que hemos padecido algunos y otros gobiernos funcionales también a intereses extranjeros que nos han hecho dormir cuando no retroceder, recién ahora estamos en condiciones de empezar a caminar el camino bueno con toda la experiencia que hemos vivido.

Yo soy un optimista sobre nuestro futuro.
Hay mucho por hacer, pero con reglas claras y una buena comunicación lo vamos a hacer contentos.
Ahora, tenemos que empezar por llenar el congreso de cerebros y no de perejiles que votan sin leer lo que les digan desde el ejecutivo. Así podemos evitar que algún otro que nos engañe y llegue a la presidencia nos siga haciendo perder el tiempo.