Educación

Nuestros hermanos uruguayos han llevado adelante una política enserio en educación a largo plazo.

Hace un año empezó, y hoy la mayoría de los chicos tienen una computadora personal tipo notebook o laptop, acompañada de un programa de conducción educacional ad hock que los tiene motivados y aprendiendo.

Empecé a escribir estas líneas enojado como casi siempre.

Iba hacia otro lado, estaba por hacer una comparación, pero me estoy dando cuenta en este momento de algo muy positivo.

Pienso, si nuestro vecino está en ese camino, es inevitable que tarde o temprano nosotros también empecemos a transitarlo. Por una ley natural que no sé como definir, si un vecino prospera, el otro lo hará.

Claro que siempre iremos detrás, pero eso está bien.

Y es claro que uno siempre quiere ver los resultados ahora. O por lo menos ver que damos el primer paso en un camino de verdad.

Pero los tiempos de un pueblo, de una nación, son mas largos que el tiempo de la vida de una persona, y hay que saber armarse de paciencia, y mientras, hacer lo que cada uno debe hacer.

Como siempre me gusta decir, somos una nación en la adolescencia y con una niñez difícil.

Ahora voy a estar contento de que nuestros hermanos uruguayos hallan empezado a caminar un camino de verdad.

Más temprano que tarde los seguiremos.

Distribución del ingreso y la mesa de los argentinos

Hace más de un año alzaban sus voces con estos conceptos como banderas de su política social.
¿Qué se ha hecho para llevarlo a la práctica?

No se olviden compatriotas. Eran sólo pantallas para pelearle al levantamiento de los argentinos que producen y los pueblos del interior. Para dividir a la sociedad encendiendo rencores.

Aquí expongo algunas políticas económicas y de infraestructura que efectivamente inciden en la distribución del ingreso nacional y la mesa de los argentinos:

IVA: Gran rebaja o eliminación de este impuesto en los alimentos de primera necesidad como carnes, lácteos, arroz, fideos, etc.

Tarifas: Segmentar a los consumidores según su condición económica para que los que menos tienen paguen menos y los que mas tienen paguen mas en lo que respecta a electricidad, gas y transportes.

Trabajo: Plan nacional de obras públicas en infraestructura para energía (petróleo, gas, trenes, red eléctrica). Con mayor disponibilidad de energía, la inversión privada expandirá sus fronteras.
Se crearán miles de empleos genuinos inmediatamente con estas obras, y mediatamente con la mayor inversión privada.
A su vez, el resultado final de este plan de infraestructura será un aumento en la oferta de energía (gas, combustibles, electricidad) que incidirá en la baja de estas tarifas.

Educación: Becar a los jóvenes de familias en estado de pobreza y precariedad económica para que no abandonen las escuelas e incentivar a la formación en escuelas técnicas. Ampliar la capacidad de recepción de estas últimas.

Producción: Mayor producción agropecuaria de aquellos productos de los que se derivan los alimentos de los argentinos (carnes, trigo, maíz, lácteos, verduras y frutas, etc.)

Estas son sólo algunas medidas sociales que podrían ser puestas en marcha a la brevedad si hubiera voluntad política para mejorar el presente y el futuro de los argentinos más vulnerables.

Unas son de bajísimo costo de implementación. Otras son mas onerosas pero hemos visto que hay dinero para cosas menos redituables como el fútbol; además, para estas políticas se justifica endeudarse con los organismos de crédito internacionales.

Pero nunca se oye ni al oficialismo ni a la oposición hablar sobre estos temas.
O desconocen la realidad del país, o no quieren cambiar la situación.

No olvidemos que si no combatimos la pobreza estructural, y si no mejoramos las oportunidades de los más sufridos, creando empleo y capacitándolos, el país nunca dejará de estar anclado en el subdesarrollo.


Mariano Avelino Molina